
Cuando defender la verdad no es opción, sino obediencia
Cuando defender la verdad no es opción, sino obediencia No sé si a ti te ha pasado… pero hay momentos en los que uno siente que simplemente ya no puede quedarse callado. Que callar sería, en el fondo, fallarse a uno mismo, y también al Señor. No se trata de “ganar una discusión”, ni de “tener la razón” a toda costa. Se trata de obedecer la verdad, y vivir con una conciencia tranquila delante de Dios. Vivimos tiempos complicados. No es novedad. Muchas veces quienes deberían proteger los derechos de otros, simplemente… no lo hacen. Actúan con descuido, con indiferencia, o peor aún, con un poder mal usado. Y si por algún motivo nos toca alzar la voz para denunciarlo, lo más probable es que alguien nos mire como si…