Cuando escuchamos la palabra “evangelio”, muchas veces la asociamos a iglesias, predicadores, programas de televisión o incluso rituales religiosos.
Pero, ¿qué es realmente el Evangelio según la Biblia?
La respuesta es mucho más hermosa, poderosa y vital de lo que muchos imaginan.
El Evangelio no es una religión.
Es una buena noticia que puede cambiar tu vida para siempre.
¿Qué significa la palabra ‘evangelio’?
La palabra “evangelio” viene del griego euangelion, que significa:
- “Buena noticia” o “buen mensaje”.
El Evangelio es el anuncio de algo que ya fue hecho, de una victoria que ya se logró, de un regalo que ya está disponible.
No es un conjunto de reglas para alcanzar a Dios.
Es la noticia de que Dios mismo bajó para alcanzarnos a nosotros.
¿Cuál es el corazón del Evangelio?
El apóstol Pablo lo resumió así:
“Porque ante todo les transmití a ustedes lo que yo mismo recibí: que Cristo murió por nuestros pecados según las Escrituras, que fue sepultado, que resucitó al tercer día según las Escrituras.”
— 1 Corintios 15:3-4 (NVI)
El Evangelio es:
- Cristo murió por nuestros pecados, pagando el precio que nosotros no podíamos pagar.
- Fue sepultado, confirmando Su muerte real.
- Resucitó al tercer día, venciendo al pecado y a la muerte.
Todo para que nosotros podamos tener vida eterna.
¿Por qué necesitamos el Evangelio?
La Biblia enseña que:
- Todos hemos pecado.
“Todos han pecado y están privados de la gloria de Dios.”
— Romanos 3:23 (NVI)
- El pecado nos separa de Dios.
- No podemos salvarnos por nuestras obras o méritos humanos.
- La paga del pecado es la muerte espiritual.
Pero la buena noticia es esta:
“Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor por nosotros, nos dio vida con Cristo, aun cuando estábamos muertos en pecados. ¡Por gracia ustedes han sido salvados!”
— Efesios 2:4-5 (NVI)
El Evangelio es Dios rescatándonos, no nosotros ascendiendo.
¿Cómo responde una persona al Evangelio?
No basta con conocer la noticia.
Debemos recibirla y responder con fe y arrepentimiento.
“Arrepiéntanse y crean en las buenas nuevas.”
— Marcos 1:15 (NVI)
Esto significa:
- Reconocer que hemos estado lejos de Dios.
- Creer que Jesús es el Hijo de Dios que murió y resucitó por nosotros.
- Confiar en Él como nuestro Salvador personal.
- Entregarle nuestra vida para seguirlo.
Cuando hacemos esto de corazón, somos perdonados, restaurados y transformados.
¿Qué cambia cuando crees en el Evangelio?
- Recibes vida eterna:
“Porque tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna.”
— Juan 3:16 (NVI)
- Tienes paz con Dios:
“Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo.”
— Romanos 5:1 (NVI)
- Eres hecho hijo de Dios:
“Mas a cuantos lo recibieron, a los que creen en su nombre, les dio el derecho de ser hijos de Dios.”
— Juan 1:12 (NVI)
El Evangelio no es solo para el día que morimos.
Es vida nueva que comienza aquí y ahora.
Una invitación para hoy
El Evangelio no es una filosofía.
No es un sistema.
No es un ritual vacío.
Es una persona: Jesucristo.
Hoy, esta buena noticia también es para ti.
Hoy puedes dejar atrás la condena, la culpa, el vacío…
y recibir el regalo de vida eterna que Dios te ofrece gratuitamente.
Jesús sigue extendiendo Sus brazos abiertos:
“Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie llega al Padre sino por mí.”
— Juan 14:6 (NVI)
Hoy puedes hacer del Evangelio tu realidad.
Hoy puedes pasar de la muerte a la vida.
Ya conociste la buena noticia.
Sigue descubriendo su poder leyendo Romanos, una carta que profundiza la gracia de Dios.